En el dinámico entorno empresarial actual, las empresas que invierten en la capacitación de su personal no solo mejoran la productividad y la calidad de sus servicios, sino que también se posicionan mejor para enfrentar los desafíos del mercado. Sin embargo, muchas organizaciones desconocen que pueden aprovechar los excedentes de SENCE para financiar sus programas de capacitación. Estos fondos no utilizados representan una oportunidad significativa para impulsar el crecimiento y desarrollo de las empresas sin incurrir en costos adicionales.

En este artículo, te contaremos sobre los excedentes y su potencial para las empresas.

El Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (SENCE) en Chile permite a las empresas acceder a una franquicia tributaria para financiar actividades de capacitación. Esta franquicia permite descontar los gastos en formación de los impuestos, generando un alivio financiero. Sin embargo, cuando las empresas no utilizan la totalidad de estos fondos, se generan excedentes de SENCE.

Estos excedentes representan montos que ya han sido destinados a capacitación, pero que aún no se han utilizado. Lo más interesante es que las empresas pueden redirigir estos fondos hacia nuevas actividades de formación, beneficiando tanto a sus colaboradores como a su cadena de valor, incluyendo proveedores y clientes.

Muchas empresas desconocen el valor estratégico de los excedentes de SENCE. Estos fondos no utilizados pueden convertirse en un motor clave para la mejora continua, la certificación de competencias y el desarrollo de habilidades críticas dentro de la organización. En lugar de dejarlos pasar, los excedentes pueden ser aprovechados de múltiples maneras:

• Capacitación Interna: Los excedentes pueden ser utilizados para financiar cursos que mejoren las competencias de los trabajadores. Esto no solo aumenta la productividad, sino que también contribuye a la retención de talento, ya que los colaboradores valoran las oportunidades de desarrollo profesional.

• Capacitación Externa: Las empresas también pueden utilizar estos fondos para capacitar a sus proveedores y clientes. Esto es especialmente útil en sectores donde la calidad y la eficiencia en toda la cadena de suministro son cruciales. Capacitar a los proveedores mejora la calidad de los insumos, mientras que capacitar a los clientes mejora la experiencia de uso de los productos o servicios.

• Certificación de Competencias: La certificación de competencias permite validar formalmente las habilidades de los trabajadores, asegurando que cumplen con los estándares de la industria. Esto es especialmente valioso en sectores altamente regulados o técnicos, donde la certificación es un requisito para operar.

• Programas de Inclusión Laboral: Los excedentes de SENCE también pueden destinarse a programas de inclusión laboral, integrando a personas en situación de discapacidad o en riesgo de exclusión social. Estos programas no solo cumplen una función social importante, sino que también diversifican la fuerza laboral y enriquecen el ambiente de trabajo.

• Desarrollo Organizacional: Finalmente, los excedentes pueden ser utilizados para financiar planes de desarrollo organizacional que alineen la capacitación con los objetivos estratégicos de la empresa. Esto incluye desde la implementación de nuevas tecnologías hasta la mejora de procesos internos.

Para aprovechar al máximo los excedentes de SENCE, las empresas deben estar al tanto de su situación tributaria y de los fondos disponibles. El primer paso es verificar con el SENCE si la empresa cuenta con excedentes. Luego, es importante identificar las áreas donde la capacitación puede generar el mayor impacto, ya sea en la mejora de competencias técnicas, la certificación de habilidades o el fortalecimiento de la cadena de valor.

Para esto último, es recomendable realizar un diagnóstico de las necesidades de capacitación y diseñar un plan estratégico que maximice el uso de estos recursos.

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